Tolón, tolón

Mi papi me llevaba todas las mañanas bien temprano a hacer excursiones en Andorra, mientras mi hermanita humana dormía un poco más y mi mami organizaba un poco los cachivaches que nos llevábamos durante el día. En una de estas salidas, nos encontramos con un montón de vacas. Me encanta ladrar a las vacas porque son tontas, pero reconozco que me dan miedo las que llevan campano porque lo hacen sonar y me asustan. Igual no son tan tontas...
También vimos marmotas, ardillas y ciervos, pero a papi no le dio tiempo de hacer fotos. ¡Qué pasada la naturaleza salvaje!
Rock&Guau!

Fines de semana en verde

Me encanta ir a Andorra y a mis papis también. Es maravilloso el contacto con la naturaleza y poder correr a todas horas por los prados y no usar en ningún momento la correa. Aunque reconozco que soy un poco pesado cuando veo un río o un lago y no hago caso a las llamadas de mis papis (a pesar de que los estoy escuchando, pero no me interesa, jeje).
Aquí estoy en los Estanys de Tristaina, en el sector de Ordino, un lugar perfecto para una ruta con perrines y niños, ya que no entraña demasiada dificultad y como colofón, es posible darse un baño en estos lagos, aunque el agua está muy fría. Ya os seguiré contando de Cantabria y Andorra las próximas semanas.
Rock&Guau!

Mis papis son geniales

Acabamos de volver de Cantabria, pero hoy me he enterado que nos vamos de nuevo de fin de semana largo. ¡Sí! Esta vez vamos a Andorra, nuestro pequeño paraíso natural en mitad de los Pirineos. Además, es un país que quiere mucho a los perrines y hay mucha tolerancia para entrar en todas partes.
La foto de hoy es en Medio Cudeyo, muy cerca de Santander, es un entorno precioso y hay una pequeña granja donde los niños pueden aprender a relacionarse con los animales domésticos y un embalse, donde me estoy bañando porque soy un osado.
Rock&Guau!

Soy un abusón de vacas

Existe un valle en Cantabria quizás menos conocido por los turistas, ya que suelen llegar sólo hasta la cueva de El Soplao, mientras que si sigues la carretera, llegas al valle de Polaciones, una zona muy auténtica rodeada de montañas y con los verdes más increíbles que los ojos pueden soportar. Además, en otoño es un lujo contemplar los colores de los árboles a medida que pierden las hojas. A mis abuelos humanos les gusta mucho comer en el Restaurante Polaciones, en La Laguna, y para allá que fuimos. Por cierto, este lugar no deberías perderte los "langostinos de Polaciones" que son los clásicos torreznos de cerdo, fritos en el momento.
Mientras esperábamos para entrar a comer, me dediqué a ser un abusón con unas vacas tudancas que andaban por allí. El papi dice que dejaré de perseguirlas cuando alguna me meta una coz. Pero mientras tanto...
Rock&Guau!

Dunas de Liencres

Aquí estoy en la ría de Mogro, en la salida al mar en la playa de Valdearenas, en el Parque Natural de las dunas de Liencres. En temporada de baño, los perrines no podemos pisar la playa, pero de la zona de ría no hay ninguna prohibición, por lo que es un lugar frecuentado por perrines y sus papis y mamis durante la temporada estival. Al no haber socorristas ni servicio de limpieza, hay que tener un poco de cuidado a la hora de bañarse por el tema de la subida de la marea y, por supuesto, no dejar ningún residuo y llevarse la basura para poder seguir disfrutando de este pequeño paraíso.
Por cierto, la mami humana nos enseñó una cosa muy divertida: tirarse desde lo alto de la duna dejando que te arrastre la arena hasta abajo.
Rock&Guau!

Villa marinera y perruna

Aquí me tenéis en San Vicente de la Barquera, uno de los pueblos marineros más auténticos de Cantabria. Cada vez que vamos, siempre me dejan bañarme entre las barcas: si la marea está alta, me tiro desde la cuesta del muelle y si está baja, voy corriendo como un loco hacia el agua. Pero lo mejor de este lugar (además de su belleza y singularidad) es que han abierto otra playa oficialmente perruna de Cantabria, La Maza o de Los Vagos, que cuenta con servicios adaptados para los perrines: con una ducha para nosotros y un bebedero. El único problema en verano es que ¡se ha quedado pequeña! porque afortunadamente la gente viaja más con sus perrines.
Por cierto, es la playa que se ve al fondo de la foto: 150 metros de arena blanca y fina sin apenas olas.
Rock&Guau!

Vuelta a la realidad

Ya volvemos a la rutina después de pasar unos días en Santander. Ya os he dicho que la mami humana es de allí y cada vez que podemos, nos escapamos unos días porque, aunque digan que llueve mucho, no es verdad del todo. Yo puedo asegurar que en un mismo día puedes tener las cuatro estaciones, por eso es tan verde y esponjoso todo. Esta semana os enseñaré algunos rincones en los que hemos estado.
Soy tan feliz allí: vamos a la playa, a la montaña, al parque de al lado de casa, al monte, descubrimos sendas costeras, huelo rastros en los prados, los abuelos humanos me dan de comer de su comida aunque mis papis les riñen por hacerlo, voy a visitar a los tíos, que tienen una perrita miedosa y la chuleo comiéndome su comida y jugando con su peluche, voy casi todo el día suelto, me dejan dormir en su cama y hace más fresquito que en casa. Por eso, siempre que volvemos, me quedo un poco triste y ayer estuve muy apático, no me apetecía hacer nada, sólo quería curar mis agujetas de felicidad.
Rock&Guau!

On the road again

¡No puedo esperar más! En cuanto la mami humana salga de su trabajo, nos pondremos en carretera para ir a ver a los abuelos santanderinos. Yo, por si acaso, voy a coger hueco en el coche y, como me gusta tanto viajar, me dormiré tranquilo hasta que hagamos la primera parada.
Rock&Guau!

Tengo mucho morro

Os presento la mesita plegable que usa mi mami humana para hacer sus manualidades: le encanta coser, ganchillear, pegar cosas con otras cosas, hacer collares, dibujar, aprender nuevas técnicas o inventárselas ella y por eso necesita tener a mano una mesita para que no se le escurra todo por el sofá y nos podamos pinchar con las agujas. Pero ayer me he adelantado. Mientras ella estaba jugando con la hermanita humana, he aprovechado su despiste para encaramarme en la mesa y echar una siesta. Además, me hace gracia cuando finge que se enfada conmigo porque pone una cara muy divertida. Lo mejor es que después me coge en brazos y me deja en suelo no sin antes darme un beso en la cabezota.
Rock&Guau!

Soy un peluchote

No hay nada mejor en la vida que dormir al lado de los papis y la hermanita humana. Menos mal que compraron la cama más grande que había en el Ikea y cabemos todos holgadamente. Y lo mejor del mundo es cuando uno de los dos me abraza para dormir como si fuera su peluche.
Rock&Guau!

Hasta la próxima, Colega

Desde que tengo uso de razón canina, he admirado a uno de mis congéneres: Colega. Este perrín ha mejorado la vida de muchos de nosotros siendo pionero junto a su mami humana, Micaela, de una de las mejores páginas web de apoyo para nosotros los perrines: Sr Perro. Una idea brillante y un trabajo tremendo de Colega y Micaela, comentando lugares perroperfectos y señalando los locales petfriendly a lo largo y ancho de la geografía española.
Hoy me he enterado de que Colega se ha ido al cielo perruno, que está situado detrás del arco iris y allí se puede entrar en todas partes, hay muchos huesos de vaca blancos y lagos para bañarse a todas horas.
Mis papis y yo queremos darte las gracias y hacer este modesto homenaje al perrín que no sólo cambió la vida de Micaela, sino, la nuestra. Gracias y feliz viaje.
Rock&Guau!

Un verano en Santander

Ya no queda nada para pasar una semanita de vacaciones en Santander. ¡Qué ganas! Vamos a ver a los abuelitos humanos, bañarnos mucho en la playa y correr por los prados tan verdes. He oído que los papis han reservado un par de días en Picos de Europa y me he emocionado mucho. Me encanta porque hay todo lo que adoro: ríos, montañas y vacas para ladrar.
Esta foto es de abril, en la Virgen del Mar, cerca de Santander, donde se demuestra una vez más el clima tan "malo" que hace por el norte.
Rock&Guau!

Olimpiadas en Rio

Mañana empiezan los Juegos Olímpicos de Rio 2016. A mami le gusta mucho el judo y el taekwondo, ya que el karatedo no es un deporte olímpico. Cuando era más jóven, hacía sus pinitos en el tatami y hace unos años, comenzó a practicar jiu jitsu. Y todo porque dice que le relaja y le centra la cabeza, aunque reconoce que alguna vez a vuelto a casa con un chinchón de más.
Y por eso me compró un kimono para estar por casa. ¡Soy un ninja! ¡Kiaaaa!
Rock&Guau!

Las playas no son para el verano

Añoro estos días de invierno cuando los papis me llevaban a la playa. Ahora es imposible porque entre el calor abrasador que hace y que se han reducido las playas para perrines, prefieren llevarme a un río o a algún bosque un poco fresquito y si no, pues me mojan con las pistolas de agua, que mola un montón.
Rock&Guau!

Hoy, al veterinario

Ayer me picó algún bichito que me causó una reacción alérgica en el morro y hoy papi me llevará al veterinario porque además, me tienen que poner la última vacuna de la rabia para el pasaporte.
Menos mal que la mami me estuvo mimando un rato: me bañó, me dio unas chuches, me puso hielo en el hocico y luego me estuvo vigilando por si tenía alguna reacción.
Y la hermanita pequeña me animaba con sus grititos.
Por cierto, en esta foto estoy en la playa de Mataleñas de Santander y me he enterado que en unos días ponemos rumbo a ver a los abuelitos. ¡Muero de ganas!
Rock&Guau!

Nieve, ven a mí

Una imagen refrescante para unos días de muchísimo calor y humedad. Estos días, el papi me saca por el bosque porque es el único sitio donde hay sombra aunque no se está fresquito porque el verano está apretando en exceso. Pero lo que hace es llevar dos cantimploras con agua: una para él y otra para mí y cuando acabamos el paseo, me deja refrescarme en una fuente. No os hacéis una idea de lo mucho que sueño con la nieve.
Rock&Guau!

Uno de agosto y todo sereno

La mami hoy está estresada porque es primero de agosto y lo odia. Además, hoy ha empezada el día un poco duramente: la hermanita se ha despertado berreando a una hora no habitual; como es agosto, los servicios de transporte público se reducen mucho, por lo que el autobús iba hasta los topes vomitando gente; cuando ha llegado a Barcelona, llovía lo suficiente para llegar empapada al trabajo y, evidentemente, ha llegado tarde. Cuando vuelva, estaba pensando en comérmela a lametones.
Rock&Guau!